¡No soy capaz de leerlo!
A lo largo de los años me he topado, en no pocas ocasiones, con personas que, en algún momento de su vida, habían decidido abordar la lectura de El Señor de los Anillos de J.R.R. Tolkien, o alguna de las obras que expanden el mundo de la Tierra Media, pero que habían fracasado ampliamente en su empeño. Incluso contando con haber visto las películas, hay que reconocer que no son obras muy accesibles al lector promedio por diferentes motivos, aunque depende en gran medida del libro elegido.
Por ello, me he decidido, desde mi experiencia, a tratar de exponer unos pequeños consejos que pueden ayudarnos a que nos resulte, no sólo mas fácil, sino también mas satisfactoria la lectura.
J.R.R. Tolkien

Quiero empezar hablando un poquito del autor, ya que puede explicar muchos de los problemas que mucha gente se encuentra al leer sus obras.
Tolkien fue un filólogo en lengua inglesa, que impartió clases en la Universidad de Oxford sobre, entre otros, el verso heroico en inglés antiguo, historia del inglés, filología germánica, gótica, islandés antiguo o medieval galés.
Se sabe que estudió finlandés por su cuenta para profundizar en el Kalevala, epopeya mitológica finlandesa. Esta obra tiene, además, una influencia enorme en la Tierra Media, con muchos paralelismos y personajes inspirados.
El conjunto de sus obras sobre la Tierra Media conforma la “mitología de la Tierra Media” o, como el mismo Tolkien denominó, Legendarium, en contra del término “universo” más empleado para otros mundos.
También aprendió, a lo largo de su vida, una docena de idomas (algunos antiguos) y estudió otras tantas. Todo en su afán de profundizar en el conocimiento de las lenguas germánicas.
Filólogo por vocación y se nota
De todo este aprendizaje y estudio de las lenguas nacen todas las lenguas que podemos ver a lo largo de la obra que engloba la historia de la Tierra Media. De ellas dejó hasta reglas de pronunciación, y las podemos encontrar en los apéndices de algunos de sus libros.
Como curiosidad, pese al gran esfuerzo de Tolkien por crear lenguajes coherentes, ninguna de las lenguas que aparecen en su Legendarium cumple la Ley de Zipf.
Tolkien era un profundo enamorado del estudio del lenguaje y las lenguas, y ello lo llevó, en sus obras, a ser tremendamente exhaustivo en todos los aspectos que circundasen el lenguaje y la mitología. Esto tuvo dos consecuencias:
- Tenemos toda una mitología muy rica, variada y, sobre todo, profunda. Con sus razas, criaturas, historias, lenguajes…
- Nos enfrentamos a una maraña de razas, nombres, epítetos, genealogía y palabras extrañas que pueden marear si no estamos acostumbrados: ¿y este quién es?, ¿es el mismo?, ¿por qué aquí le llama distinto? Y un largo etcétera.
Por dónde empezar
Esto puede depender un poco de nuestros gustos literarios y de cuán acostumbrados estamos a la lectura de fantasía épica, pero partiendo que este post nace para gente con dificultades para abordar la obra de Tolkien, la primera recomendación es que en el orden cronológico de la historia NUNCA.
Y lo dice alguien para el que El Silmarillion está entre sus libros favoritos, y que abre el Legendarium con el mito de la creación. Y si no empezamos por el principio, ¿por dónde?
Las dos historias
En el obra de Tolkien hay dos partes. Por un lado tenemos la “historia principal”, y que abarca la historia de Bilbo y Frodo y sus peripecias en torno al Anillo Único (final de la tercera edad) y que han sido adaptadas a las conocidas trilogías cinematográficas de Peter Jackson. Por otro tenemos la “historia de contexto”, que incluye desde el mito de la creación hasta la aparición de Bilbo.
Para comenzar, nos centraremos en la historia principal, ya que por un lado contamos con la referencia de las películas, y por otro, narrativamente hablando, son las mas uniformes, dado que la mayor parte de las obras que conforman la historia de contexto fueron recopiladas y editadas por su hijo Christopher con muchas dificultades (mas adelante trataremos sobre ello).
El Hobbit
El inicio de todo. Esta es sin duda la obra mas fácil de abordar de J.R.R. Tolkien, ya que es una novela de corte infantil/juvenil y por tanto la complejidad narrativa es mucho menor.
Sienta gran parte de los cimientos de El Señor de los Anillos, y aunque no profundiza tanto como en el resto de su obra, le da para introducir razas que no se nombran nunca más, como los cambiaformas (Beorn) o los gigantes de roca.
Un consejo, que es válido también para el Señor de los Anillos (y la fantasía en general), es no intentar ubicarse a cada localización que sale y quedarse con cada personaje que se nombra, intentando saber quién es y de quién es es hijo, ya que muchas veces es meramente descriptivo y circunstancial (que aporta, como dije, mucha profundidad, pero también facilita perderse).
En este caso, además, el mapa es críptico y bastante impreciso (conforme es en la propia historia). Por lo que, en este caso, tampoco nos ayudará gran cosa.
Yo soy partidario de una lectura ágil y amena. De rompernos la cabeza con los árboles genealógicos nos va a sobrar tiempo.
La trilogía de películas
Es un tema, en este caso, peliagudo. El Hobbit es una novela bastante corta (sobre todo comparada con su continuación) y no daba para 3 películas de ese metraje ni estirando la acción.
Peter Jackson se apoyó en material adicional del Legendarium y se inventó un montón de cosas: las apariciones de Legolas, Saruman, Galadriel y Radagast, el papel de Azog o directamente personajes y tramas cómo todo lo que rodea a Tauriel. Por lo que nos pueden dar una idea muy buena del global, pero vamos a ver muchas diferencias.
El Señor de los Anillos
De los Hobbits
Empieza a complicarse la cosa. El libro empieza con uno de los grandes muros que la literatura de Tolkien, su prólogo minucioso sobre la historia y costumbres de los hobbits y el posterior y extenuante cumpleaños de Bilbo.
En este prólogo se describe a los Hobbits, sus tradiciones, su forma de ser, la organización territorial y política, principales exportaciones… ¿Es relevante para la historia? Pues en general no. No te lo aprendiste sobre España en el colegio, pese al esfuerzo de los docentes, no te lo aprendas aquí para poder disfrutar de la historia.
La idea es quedarte con la idea general que transmite de los Hobbits como raza pacífica que está ahí sin meterse con nadie, y como Bilbo es visto como un subversivo por haberse ido con extranjeros a buscar aventuras. Algo que por otro lado, ya se dejaba caer en El Hobbit.
Una familia muy muy extensa
Con el cumpleaños de Bilbo pasa un poco lo mismo. Allí empieza a salir gente y gente, con sus nombre, apellidos, relaciones de parentesco, de donde vienen, en un desfile que de nuevo es descriptivo hasta el absurdo, pero que en su gran mayoría no tienen repercusión pasado el evento que ya de por sí, es meramente un punto de inflexión en la vida de Bilbo y Frodo. Como con el Hobbit, sólo hay que quedarse con lo importante.
Mapas y árboles genealógicos
A partir de aquí, si que hay que ir teniendo algo mas de atención en acontecimientos, lugares y personajes, y es muy útil tener tanto los mapas como los árboles genealógicos a mano para momentos puntuales.
Lo del mapa en las primera páginas y los apéndices al final están bien, pero es un peñazo que no veas tener que andar yendo adelante y atrás. Ahora existe una cosica llamada internet, y te lo pones en el móvil que se ve estupendo y es mas rápido.
Esto de internet y la tecnología es una maravilla, podéis consultar aquí los mapas de la Tierra Media en modo Google Maps y pudiendo añadir las rutas que sigue cada personaje en la historia.
Tened en cuenta que algunos personajes utilizan diferentes nombre a lo largo de la obra (Trancos > Aragorn > Elessar) según quién los nombre y que, además, a veces tienen epítetos épicos y nombran a media familia para identificarlos (Aragorn, Hijo de Arathorn, heredero de Elendil). Al principio es un poco como redundante y confuso, dado el parecido de algunos nombres, pero se le acaba cogiendo el gustillo y tampoco es demasiado exagerado.
La trilogía de películas
Sinceramente, creo que es una adaptación difícil de superar. El Señor de los Anillos es un señor librazo y condensarlo para poder meterlo en 3 películas era una tarea complicada, que me parece que Peter Jackson solventó muy bien.
Aunque para mí eliminó cosas que me parecen fundamentales en la historia, como la parte de los túmulos en La comunidad del anillo o el final del libro (que no es destruir el anillo); añadió otras sin sentido como lo elfos en Helm; y en otras se tomó licencias bestiales, creo que son una buena referencia para tener respecto a la lectura del libro.
El resto del Legendarium
Si, acabado El Hobbit y la trilogía de El Señor de los Anillos, te ha sabido a poco, y sientes mucha curiosidad por historias que apenas se atisban de las edades antiguas o personajes misteriosos que apenas salen de pasada, no te preocupes porque hay para dar y tomar.
Pero ahora entramos en terreno escabroso. Tolkien falleció en 1976, y aparte de Las Aventuras de Tom Bombadil (personaje misterioso donde los haya), el resto de obras que componen el Legendarium quedaron inconclusas en una ingente cantidad de material en forma cartas, papeles y libretas llenos de manuscritos con tachones, correcciones y cambios, incluidas diferentes versiones de la misma historia.
Hace mucho, mucho tiempo...
La edades de la Tierra Media son:
- La Creación (indefinido)
- Edad de las Lámparas (3500 años)
- Edad de los Árboles (1500 años)
- Primera Edad del Sol (590 años)
- Segunda Edad del Sol (3441 años)
- Tercera Edad del Sol (3021 años)
- Cuarta Edad del Sol (en curso)
Si esto no fuera suficiente, la dimensión del arco argumental es muy distinta, y ahora implica cientos o miles de años, mientras que tanto El Hobbit como El Señor de los Anillos desarrollan su trama a lo largo de, aproximadamente, un año cada uno y 60 años entre ellos, sucediendo ambas durante la llamada Tercera Edad del Sol.
Por fortuna, su hijo Christopher ha pasado gran parde su vida, recopilando, ordenando y dando coherencia a todo esto en forma de libros. Todos ellos tienen en común que incluyen bastante explicaciones del mismo sobre las discrepancias y decisiones que tomó a la hora de editar y publicarlos, a veces tanto que hace insufrible alguna lectura (personalmente Cuentos Perdidos 1 fue un suplicio). ¿Por dónde seguir entonces?
Los hijos de Húrin, La caida de Gondolin y Beren y Luthien
Estos fueron los tres últimos libros publicados (y no habrá más) por Christopher y son los mas redondos, intentando darle una buena coherencia narrativa e intentado centrarse exclusivamente en las historias respectivas. Las tres forman parte de la primera edad y se incluyen versiones en otras obras, estando las tres completamente contenidas en El Silmarillion.
El hecho de que la narrativa esté cohesionada y revisada los hace como una novela más, y la lectura está en un punto cercano a El Señor de los Anillos. Si que son algo mas complejas a nivel de nombres, porque como digo, el arco argumental es amplio e increíblemente todos se cruzan con todos en algún momento, que es lo que hace realmente complejo el Silmarillion.
Es en general muy recomendable su lectura (yo aún tengo 1 pendiente) porqué se aparta del género habitual y, aunque la épica sigue ahí, yo, personalmente, los categorizaría de tragedias.
El Silmarillion
Aquí hay que cambiar de chip, porque, aunque siga categorizándose de fantasía épica, la mentalidad que hay que tener para leerlo no es esa, sino la de leer un tratado mitológico, un compendio de mitos y leyendas, al igual que cuando leemos libros de mitología de Grecia y Roma.
Unido a lo que se cuenta en Los cuentos perdidos, Los cuentos inconclusos y otras obras secundarias es un paralelismo que me parece muy adecuado. Esto se debe a que la narrativa es muy inconsistente, se cruzan historias continuamente. También cambian de nombre o epíteto según la parte del libro o el libro que leas, incluso a veces cambia la raza del personaje principal. Tal cuál como si leemos los mitos griegos de la mano de los diferentes autores que los escribieron en su época y que hace que tengamos la misma tarea realizada por diferentes héroes o que padre o madre del mismo varíen según el autor.
Si nos mentalizamos de que es mitología, que es imprecisa por definición, como que han llegado a nosotros tras generaciones de transmisión oral, va a ser una obra muy entretenida, que va a dar muchísima profundidad al Legendarium y que tiene uno de los mitos de la creación que a mi, personalmente, mas me ha gustado.
Nos vamos a encontrar magia, tragedias, amor, traiciones, venganzas, maldiciones, dioses y criaturas de todo tipo en una obra que pretende dar explicación al mundo (mitología) y las razas que lo habitan.
Otras obras
Una vez superado El Silmarillion, ya cualquiera de los libros adicionales es pan comido y no te supondrá ningún problema enfrentarte a él.
Un universo incomparable
J.R.R. Tolkien creo uno de los universos mas ricos en los que he tenido el placer de sumergirme, y es un lectura que, aunque no siempre es sencilla, siempre recomiendo, sobre todo El Silmarillion.
Si creéis que me he dejado algo o opináis que el orden y la manera de leerlo debería ser otra, estoy abierto a generar un debate en la zona de comentarios.
Créditos de las imágenes
- Abordar de la obra de Tolkien | Awenyr Luna | CC BY 4.0
- El Hobbit | Minotauro | ISBN 9788445073803
- El Silmarillion | Minotauro | ISBN 9788445073810
- Legendarium | Goran V. Frosty | CC BY 4.0
- El Señor de los Anillos - La Comunidad del Anillo | Círculo de Lectores | ISBN 9788422697664
- J.R.R. Tolkien | Desconocido | Dominio público